México complica el Mundial: Verstappen lejos, Ferrari y McLaren al acecho
El GP de México deja a Verstappen lejos en la clasificación, mientras Ferrari y McLaren muestran un rendimiento que podría cambiar la pelea por el Mundial.
El Gran Premio de México ha dejado una imagen poco alentadora para Max Verstappen y Red Bull, quienes se mostraron claramente superados durante la primera jornada de entrenamientos libres. "We were nowhere", reconoció el vigente campeón tras una sesión que evidenció las limitaciones de su monoplaza en el trazado mexicano.
En contraste, Ferrari y McLaren aprovecharon para exhibir un ritmo más competitivo, especialmente en tandas largas, lo que podría impactar directamente en la clasificación del Mundial tanto de pilotos como de constructores. Charles Leclerc lideró la FP1, dejando claro que la Scuderia no ha tirado la toalla y aspira a un milagro en México con una estrategia y rendimiento que desafían la supremacía habitual de Red Bull.
Por su parte, McLaren sorprendió con un ritmo de carrera superior incluso al de Verstappen en vueltas rápidas, lo que podría significar un golpe de efecto en la lucha por el segundo puesto en el campeonato de constructores. La mejora en el rendimiento de McLaren, un equipo que parecía estancado, añade un nuevo actor a la pelea por el podio en la clasificación general, aumentando la presión sobre Red Bull y Ferrari.
El equipo de Milton Keynes introdujo una actualización técnica destinada a mejorar el rendimiento de Verstappen, pero los resultados en pista no fueron los esperados. A pesar de este impulso, el neerlandés se mostró pesimista y advirtió que la batalla en México será complicada. La confianza en el paquete técnico parece estar en duda, y la estrategia podría jugar un papel decisivo para evitar un desastre en la clasificación del Mundial.
Otro factor que complicó la sesión de clasificación fue el tráfico en pista, un problema señalado por George Russell. El piloto de Mercedes alertó sobre una posible "issue" en la clasificación debido a la congestión, que podría provocar salidas tempranas y trastocar el orden esperado en la parrilla. Este aspecto añade incertidumbre a una jornada ya llena de incógnitas y desafíos.
En cuanto a los rookies, su participación en los libres también tuvo altibajos. Pato O'Ward, por ejemplo, sufrió problemas de salud que limitaron su rendimiento en FP1, aunque la atención médica le permitió continuar. Mientras tanto, Oscar Piastri destacó las dificultades que enfrenta en su adaptación, contrastando con un Verstappen que, a pesar de las complicaciones, sigue siendo el principal rival en la lucha por el título.
En resumen, el GP de México puso en evidencia que la Fórmula 1 actual no es tan predecible como parece. La aparente hegemonía de Red Bull se tambalea frente a la pujanza de Ferrari y McLaren, y la batalla por el Mundial podría sufrir un vuelco inesperado si estas tendencias se mantienen. El purismo de la competición exige que gane el mejor en pista, no solo el más favorecido por la tecnología o las circunstancias, y México podría ser el escenario donde esta máxima se reivindique.
Las próximas sesiones serán decisivas para confirmar si Ferrari y McLaren pueden capitalizar sus fortalezas y si Red Bull logrará revertir la situación para mantener el control en la clasificación de pilotos y constructores. La Fórmula 1, en su esencia más pura, vive momentos de incertidumbre que solo benefician a quienes disfrutan de una competición verdaderamente disputada.